ORDINARY TIME ~ CYCLE B-1
WEDNESDAY of the TENTH WEEK

GOSPEL
Matthew 5:17-19
Jesus said to his disciples: “Do not think that I have come to abolish the law or the prophets. I have come not to abolish but to fulfill. Amen, I say to you, until heaven and earth pass away, not the smallest letter or the smallest part of a letter will pass from the law, until all things have taken place. Therefore, whoever breaks one of the least of these commandments and teaches others to do so will be called least in the Kingdom of heaven. But whoever obeys and teaches these commandments will be called greatest in the Kingdom of heaven.”

HOMILY

Jesus reminds us, “I have not come to abolish the law, but to fulfill it.”
The history of our journey toward salvation began just after our first parents committed the Original Sin. And this journey will continue until Jesus returns again to judge the living and the dead. GΘD has been faithfully executing his plan of salvation throughout the history of the world. All that he did throughout the Old Testament was in preparation for the coming of Jesus. And all that the Holy Spirit continues to do through the Church is the faithful unfolding of what Jesus began. This is what the Lord wants us to understand when he tells us: “I have not come to abolish the law or the prophets…but to fulfill them.” The Catechism of the Catholic Church reminds us that “The New Testament lies hidden in the Old and the Old Testament is unveiled in the New” (CCC 129). And so, if we want to continue to grow in our understanding of GΘD and his plan for our lives, we can do so by diligently studying the whole Bible and seeing how the Lord has revealed himself multiple times through his words and actions in every period of human history. In addition, discovering the connections between all the different books of the Bible can help us know Christ better and grow in the wisdom that brings peace and joy to our souls.
Jesus reminds us, “I have not come to abolish the law, but to fulfill it.”
By faithfully studying the Scriptures, you will see that Jesus speaks the truth.

TIEMPO ORDINARIO ~ CICLO B-1
MIÉRCOLES de la DÉCIMA SAMANA

EVANGELIO
Mateo 5, 17-19
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “No crean que he venido a abolir la ley o los profetas; no he venido a abolirlos, sino a darles plenitud. Yo les aseguro que antes se acabarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la más pequeña letra o coma de la ley. Por lo tanto, el que quebrante uno de estos preceptos menores y enseñe eso a los hombres, será el menor en el Reino de los cielos; pero el que los cumpla y los enseñe, será grande en el Reino de los cielos”.

HOMILÍA

Jesús nos recuerda: “No he venido para abolir la ley, sino para cumplirla”.
La historia de nuestro viaje hacia la salvación comenzó justo después de que nuestros primeros padres cometieran el pecado original. Y este viaje continuará hasta que Jesús regrese de nuevo para juzgar a vivos y muertos. DIΘS ha estado ejecutando fielmente su plan de salvación a lo largo de la historia del mundo. Todo lo que hizo a lo largo del Antiguo Testamento fue en preparación para la venida de Jesús. Y todo lo que el Espíritu Santo continúa haciendo a través de la Iglesia es el fiel desarrollo de lo que Jesús comenzó. Esto es lo que el Señor quiere que entendamos cuando nos dice: “No he venido para abolir la ley ni los profetas ... sino para cumplirlos”. El Catecismo de la Iglesia Católica nos recuerda que “El Nuevo Testamento yace escondido en el Antiguo y el Antiguo Testamento se devela en el Nuevo” (CIC 129). Y así, si queremos seguir creciendo en nuestro entendimiento de Dios y su plan para nuestras vidas, podemos hacerlo estudiando diligentemente toda la Biblia y viendo cómo el Señor se ha revelado a sí mismo varias veces a través de sus palabras y acciones en cada período de la historia humana. Además, descubrir las conexiones entre los diferentes libros de la Biblia puede ayudarnos a conocer mejor a Cristo y a crecer en la sabiduría que trae paz y gozo a nuestras almas.
Jesús nos recuerda: “No he venido para abolir la ley, sino para cumplirla”.
Al estudiar fielmente las Escrituras, verá que Jesús dice la verdad.